¡Feliz 14° domingo del tiempo ordinario! También es el fin de semana en el que celebramos el 4 de julio y el recuerdo de la firma de la Declaración de Independencia.
Me llamo Padre Mark Arnzen y soy su nuevo párroco. Es con gran esperanza y alegría que regreso a San Lorenzo. Estuve aquí hace veintiún años como profesor de sexto grado (1994-2000) en la Escuela Primaria-Media antes de entrar en el seminario. Este es mi decimosexto año como sacerdote, después de haber servido en las parroquias San Martín de Tours y Espíritu Santo como vicario parroquial y luego en Santa Catalina de Alejandría y Santa Lucía como párroco. Fui una vocación tardía, pasando un tiempo después de la escuela secundaria en el Cuerpo de Marines, luego en la universidad y enseñando tanto en Nuevo México como luego de vuelta en el Área de la Bahía.
La gente siempre me pregunta cuáles son mis pasatiempos: la lectura, golpear una pelota de golf y algunas caminatas ligeras son la forma en que paso mis días libres y como una manera de relajarme y reenergizarme para servir a Dios y a su Iglesia. Mientras continuamos avanzando desde las muchas restricciones y limitaciones impuestas por las necesidades de la pandemia, todos sabemos que hay mucho trabajo que hacer para reconstruir y revitalizar nuestra comunidad parroquial y escolar. Este reto se superará a medida que nos unamos como comunidad en la oración, el trabajo duro y la esperanza. Mi esperanza para nuestra parroquia es que nos convirtamos en un miembro vital y vivificante de la comunidad local, donde a través de nuestro ministerio y escuela parroquial permitamos que el amor de Dios y la bendición de su Hijo, Nuestro Señor Jesucristo brille para traer sanación y bendición a todos los que sufren y necesitan la paz de Cristo.
Deseo agradecer al P. Ernesto, al P. Angelbert y al personal de la parroquia y de la escuela por su cálida bienvenida. El cambio es muy difícil para todos pero con la bendición de Dios y un corazón abierto caminaremos a través de este tiempo con paz y alegría y abrazaremos las nuevas posibilidades a través de nuestra fe en Jesucristo.